07 May
07May

La tradición, la costumbre y los hábitos cimentados a través del tiempo, marcan el devenir del gusto, de las maneras y de las respuestas artístico/estéticas de forma natural en las posteriores generaciones, puesto que están impregnadas en las personas por herencia cultural, aflorando sin ser cuestionadas.

Planteo dos momentos clave que creo, confeccionan una urdimbre básica sobre la que se asientan buena parte de la herencia estética ibérica contemporánea: la influencia árabe (la imaginería) y el Siglo de Oro (descripciones arquetípicas desde la literatura o la pintura).

- El “horror vacui” de raigambre árabe, influencia inédita en el resto de Europa, con su carácter extremadamente decorativista.

- Un catolicismo, necesitado también de otra exuberante iconografía, la mayoría de las veces subyugante y excesiva en todos los sentidos; lujosa, amenazante... con una fuerte presencia descriptiva del dolor.

Estos dos primeros puntos, nos inducen a una primera conclusión: lo barroco y lo religioso, potenciarán un instinto estético ibérico predominantemente emotivo, y reflejan las aguas turbias de lo ibérico:

- Lo grotesco: de los enanos de Velázquez a Chikilicuatre, pasando por las pinturas negras goyescas, la chirigota gaditana o el gusto del pueblo por los gobernantes más corruptos e impresentables.

- El drama: de la tauromaquia a los crímenes de Alcàsser, pasando por la emigración, “Bodas de sangre” o la eterna dualidad: conmigo o contra mí, Cánovas/Sagasta, nacional/rojo, monárquico/ republicano, nacionalista/centralista, Madrid/Barça...

A un nivel más terrenal:

- La chapuza (componenda, remiendo, lo ”hecho a medias”; el batiburrillo, que es nuestra versión del collage...), el dominio de lo ”cutre” y la improvisación, con una incorporación al adelanto, al progreso o la novedad, tardía (”África comienza en los Pirineos”, ”Spain is different”, “Que inventen ellos” -Unamuno-).

- La ”última hora”. Manera de acometer los problemas, siempre apurando los límites de tiempo, producto de la relajación, el miedo o la inseguridad.

También:

- El individualismo. Poca predisposición grupal, colectiva o asociativa.

- El exceso de humildad. Debido al tradicional papel secundario que España ha tenido con respecto al resto de países europeos.

Imágenes: semana santa en Balmaseda (Bizkaia) - Capeas en Allo (Navarra), finales años 70. Imagen extraída de la revista del pueblo (el señor de la derecha con tejanos, era mi padre Jerónimo)

Comentarios
* No se publicará la dirección de correo electrónico en el sitio web.
ESTE SITIO FUE CONSTRUIDO USANDO